La Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE) ha hecho un llamado urgente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que se aborde la situación del Reglamento de la Carrera Diplomática, que data de 1955, un vestigio del régimen franquista. Este reglamento, que ha quedado obsoleto y es considerado por muchos como una «grave anomalía», sigue vigente en un contexto donde la modernización y la transparencia son esenciales para el funcionamiento del Ministerio de Asuntos Exteriores.
### La Necesidad de un Nuevo Reglamento
Desde hace años, el proyecto de un nuevo reglamento ha estado en un limbo administrativo, sin que se haya presentado oficialmente para su aprobación. Alberto Virella, presidente de la ADE, ha expresado su frustración al señalar que, a pesar de que se han realizado esfuerzos para redactar un nuevo texto, este ha permanecido guardado en un cajón. La falta de un reglamento actualizado no solo afecta a la imagen del Ministerio, sino que también tiene repercusiones directas en la carrera de los diplomáticos y en la eficacia de la política exterior española.
La ADE ha argumentado que la existencia de un reglamento moderno es crucial para establecer criterios claros sobre los requisitos para acceder a determinados puestos diplomáticos. Por ejemplo, el reglamento anterior estipulaba que para ser embajador en un país clave, era necesario haber ocupado previamente el cargo de embajador en otro lugar y contar con una experiencia mínima. Sin embargo, en la actualidad, la falta de transparencia en los nombramientos ha generado desconfianza entre los diplomáticos, quienes sienten que no hay un proceso claro y justo para acceder a posiciones importantes.
### Problemas Estructurales en el Ministerio
Además de la falta de un reglamento actualizado, la ADE ha señalado otros problemas estructurales que afectan al Ministerio de Asuntos Exteriores. Uno de los más preocupantes es la escasez de personal en los consulados, donde los trabajadores, en su mayoría contratados locales, están sobrecargados de trabajo y mal remunerados. Con más de tres millones de españoles viviendo en el extranjero, la demanda de servicios consulares ha aumentado significativamente, pero el personal no ha crecido en la misma proporción. Esto ha llevado a una situación insostenible, donde los consulados no pueden atender adecuadamente a los ciudadanos españoles.
La falta de recursos también se extiende a la infraestructura de las embajadas y consulados. Muchos de estos edificios, algunos de ellos históricos, se encuentran en condiciones precarias, lo que representa un riesgo tanto para los empleados como para los visitantes. La ADE ha denunciado que la falta de atención a estos inmuebles es el resultado de años de desinversión por parte de los sucesivos gobiernos, y ha instado a que se destinen más recursos, tanto humanos como financieros, para garantizar la seguridad y el buen funcionamiento de las representaciones diplomáticas.
### Propuestas para la Modernización
La ADE no solo se ha limitado a señalar problemas; también ha presentado propuestas concretas para mejorar la situación del Servicio Exterior. En una carta reciente dirigida al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, la asociación ha planteado diez medidas específicas para reforzar y modernizar los recursos humanos y el funcionamiento de las representaciones de España en el exterior. Estas propuestas buscan no solo mejorar la eficiencia del Ministerio, sino también garantizar que España pueda defender sus intereses y valores en un contexto internacional cada vez más complejo.
Entre las medidas propuestas se incluyen la necesidad de aumentar el personal en los consulados, mejorar la formación de los diplomáticos y establecer criterios claros para los nombramientos en puestos clave. La ADE ha enfatizado que para llevar a cabo una política exterior activa y comprometida, es indispensable contar con los recursos adecuados. Sin embargo, la falta de respuesta por parte del Ministerio ha generado descontento y preocupación entre los diplomáticos, quienes sienten que sus voces no están siendo escuchadas.
### La Resistencia al Cambio
La resistencia al cambio dentro del Ministerio de Asuntos Exteriores ha sido un tema recurrente en las quejas de la ADE. A pesar de que el ministro Albares ha tomado algunas medidas, como la retirada de símbolos franquistas de las fachadas del Ministerio, la falta de un nuevo reglamento y la inacción en otros aspectos críticos han llevado a muchos a cuestionar su compromiso con la modernización del servicio diplomático.
Virella ha señalado que la situación actual es insostenible y que el Ministerio debe evolucionar para adaptarse a las demandas del mundo contemporáneo. La falta de claridad en las decisiones y la centralización de la información en un círculo reducido han creado un ambiente de incertidumbre entre los diplomáticos, quienes a menudo se sienten desinformados sobre la postura oficial de España en cuestiones clave.
### La Llamada a la Acción
La ADE ha hecho un llamado a la acción, instando al presidente Sánchez a intervenir y desbloquear la situación del reglamento. La asociación ha expresado su disposición a colaborar de manera constructiva con el Ministerio, ofreciendo propuestas y soluciones para mejorar el funcionamiento del Servicio Exterior. Sin embargo, la falta de comunicación y la percepción de desinterés por parte del Ministerio han generado un clima de desconfianza que podría obstaculizar cualquier esfuerzo por avanzar.
La situación actual del reglamento de la carrera diplomática en España es un reflejo de la necesidad de modernización y adaptación a un mundo en constante cambio. La ADE ha dejado claro que la falta de acción no solo afecta a los diplomáticos, sino que también compromete la capacidad de España para desempeñar un papel activo y efectivo en el ámbito internacional. La espera por un nuevo reglamento es, en última instancia, una espera por un futuro más transparente y eficiente para la diplomacia española.