La situación política en la Comunidad Valenciana se encuentra en un punto crítico, especialmente en lo que respecta a la figura del president de la Generalitat, Carlos Mazón. Según una reciente encuesta, un abrumador 82% de los ciudadanos considera que debería dimitir tras su gestión durante la DANA del 29 de octubre de 2024. Este dato refleja un descontento generalizado que persiste casi un año después de la catástrofe, lo que plantea serias interrogantes sobre su futuro político y la dirección del Partido Popular en la región.
La encuesta, realizada por Lápiz Estratégico Consulting, revela que la percepción negativa hacia Mazón no solo se ha mantenido, sino que ha aumentado ligeramente desde el 81,2% registrado en mayo. Este aumento, aunque mínimo, indica que la opinión pública no ha cambiado a pesar de los esfuerzos del gobierno por centrar la agenda en la reconstrucción y la normalización de la vida en las comarcas afectadas. A pesar de que las ayudas a los damnificados continúan y las protestas han disminuido, la sombra de la DANA sigue pesando sobre la figura del president.
### La Gestión de la Emergencia y sus Consecuencias
Uno de los factores que ha contribuido a este descontento es la instrucción judicial que investiga la gestión de la emergencia durante la DANA. La jueza de Catarroja ha señalado que la alerta emitida por la Generalitat fue «tardía» y «errónea», lo que ha generado un clima de desconfianza hacia la administración de Mazón. Además, se ha revelado que el president se encontraba en un restaurante durante horas críticas, lo que ha alimentado aún más las críticas sobre su capacidad de respuesta ante la crisis.
Las cifras de la encuesta muestran que el rechazo a su continuidad es más fuerte en Valencia, donde el 82,9% de los encuestados exige su renuncia. En Alicante, su provincia natal, el 81,9% también se opone a que siga en el cargo, mientras que en Castellón, aunque el rechazo es menor, aún alcanza el 80,7%. Este descontento es particularmente notable entre los jóvenes, donde el rechazo supera el 87% en el grupo de 18 a 45 años.
La situación se complica aún más cuando se pregunta a los ciudadanos si Mazón debería ser candidato a la reelección en las próximas elecciones autonómicas. Un 90,2% de los encuestados se opone a su continuidad, lo que plantea serias dudas sobre su viabilidad política en el futuro inmediato. Solo un 3,7% de los ciudadanos apoya su candidatura, lo que pone de manifiesto el abismo entre la dirección del Partido Popular y la opinión pública.
### La Respuesta del Partido Popular y el Futuro de Mazón
A pesar del rechazo generalizado, la presión interna sobre Mazón parece haber disminuido en los últimos meses. La dirección nacional del Partido Popular, encabezada por Alberto Núñez Feijóo, ha mostrado su apoyo al president, centrándose en la confrontación con el gobierno de Pedro Sánchez en lugar de abordar las críticas a la gestión de Mazón. Sin embargo, este respaldo podría ser insuficiente si la percepción pública no mejora.
La encuesta también revela que el rechazo a que Mazón repita como candidato es más fuerte en Castellón, donde un 94,4% se opone a su reelección. En Alicante, el rechazo es del 90,9%, mientras que en Valencia se sitúa en un 86,8%. Este panorama sugiere que, a pesar del apoyo que pueda recibir desde la cúpula del partido, la base electoral está claramente descontenta con su liderazgo.
La situación de Mazón es un reflejo de la complejidad política en la Comunidad Valenciana, donde la gestión de emergencias y la percepción de la eficacia del gobierno son cruciales para mantener la confianza de los ciudadanos. La presión por parte de la ciudadanía y la falta de un respaldo sólido en las encuestas podrían forzar al Partido Popular a reconsiderar su estrategia en la región, especialmente de cara a las próximas elecciones.
En resumen, la figura de Carlos Mazón se encuentra en una encrucijada. La opinión pública ha hablado y su mensaje es claro: la gestión de la DANA ha dejado una huella indeleble en la percepción de su liderazgo. Con un 82% de los ciudadanos pidiendo su dimisión y un 90,2% oponiéndose a su reelección, el futuro del president de la Generalitat está más incierto que nunca. La presión por parte de la ciudadanía y la falta de un respaldo sólido en las encuestas podrían forzar al Partido Popular a reconsiderar su estrategia en la región, especialmente de cara a las próximas elecciones.