En el contexto de la reciente riada que afectó a la Comunidad Valenciana, la actuación del president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha suscitado un intenso debate. A medida que se desvelan nuevos detalles sobre su comportamiento durante los momentos críticos de la emergencia, se plantea la pregunta de si estuvo a la altura de las circunstancias. La información más reciente indica que Mazón no solo se despidió de la periodista Maribel Vilaplana en el restaurante El Ventorro, como se había afirmado anteriormente, sino que la acompañó hasta el aparcamiento Glorieta Paz, lo que añade una nueva capa de complejidad a la narrativa de su gestión durante la crisis.
### La Cronología de los Eventos
La tarde del 27 de octubre de 2025, Mazón y Vilaplana compartieron un almuerzo en el mencionado restaurante. Según la versión más reciente, la despedida no ocurrió en el interior del establecimiento, sino en la entrada del aparcamiento cercano. Este trayecto, que dura aproximadamente dos minutos, se sitúa entre las 18:30 y las 18:45 horas, justo antes de que Mazón se desconectara de las comunicaciones durante 37 minutos.
Este apagón en la comunicación es especialmente preocupante dado que se produjo en un momento crítico, cuando la situación en el Cecopi (Centro de Coordinación de Emergencias) era de alta tensión. A las 19:00 horas, la delegada del Gobierno recibió una llamada alarmante sobre el desbordamiento del barranco del Poyo, lo que subraya la urgencia de la situación. Sin embargo, Mazón, tras despedirse de Vilaplana, se dirigió caminando hacia el Palau de la Generalitat, lo que contrasta con la gravedad de la crisis que se estaba desarrollando.
Durante el periodo de desconexión, Mazón atendió varias llamadas, pero la mayoría fueron breves y no reflejan una gestión activa de la crisis. La última llamada antes de su silencio fue a las 18:57, y la siguiente no se produjo hasta las 19:34. Este vacío en la comunicación plantea interrogantes sobre su capacidad para manejar la situación de emergencia.
### La Reacción de la Generalitat
Desde la Generalitat, se ha defendido la actuación de Mazón, afirmando que estaba «perfectamente» informado sobre la situación de la dana durante el almuerzo y en las horas posteriores. Sin embargo, la narrativa de su desconexión y el hecho de que se dirigiera a un aparcamiento en lugar de al Cecopi ha generado críticas. La versión oficial sostiene que Mazón se despidió de Vilaplana en el acceso del parking y luego caminó hacia el Palau, pero esto contradice su propia declaración en entrevistas posteriores, donde describió un recorrido diferente.
La discrepancia entre las versiones ha llevado a que se convoque a Vilaplana como testigo en la investigación que se lleva a cabo sobre la gestión de la crisis. Su testimonio podría ser crucial para esclarecer lo que realmente ocurrió durante esos momentos críticos. La escena de Mazón acompañando a la periodista hasta su vehículo, como si fuera un día normal, contrasta fuertemente con la tensión que se vivía en el Cecopi y los daños que la dana estaba causando en la provincia.
La situación se complica aún más con la llegada de Mazón al Palau, que se ha reportado que ocurrió cerca de las 20:00 horas, lo que significa que estuvo ausente de la gestión de la crisis durante un tiempo considerable. Al llegar, se encontró con un asesor que le informó sobre la gravedad de la situación, lo que sugiere que su desconexión pudo haber tenido consecuencias graves en la respuesta a la emergencia.
La falta de comunicación efectiva durante una crisis es un tema delicado, y la actuación de Mazón ha sido objeto de críticas tanto por la oposición como por la ciudadanía. La gestión de emergencias requiere una respuesta rápida y coordinada, y la desconexión del president en un momento tan crítico plantea serias dudas sobre su capacidad para liderar en situaciones de crisis.
A medida que se desarrollan los acontecimientos, la atención se centra en cómo se manejará la situación en el futuro y qué lecciones se aprenderán de esta experiencia. La transparencia en la gestión de crisis es fundamental para restaurar la confianza pública y garantizar que se tomen las medidas adecuadas para prevenir situaciones similares en el futuro.