Pablo Iglesias, exvicepresidente del Gobierno español y fundador de Podemos, ha lanzado su nuevo libro titulado «Enemigos íntimos», donde realiza un profundo análisis y crítica a diversas figuras políticas, centrándose especialmente en Yolanda Díaz, actual vicepresidenta y líder de Sumar. En este texto, Iglesias no solo repasa su trayectoria política, sino que también revela las tensiones y conflictos que han marcado su relación con Díaz, a quien considera responsable de la fragmentación de la izquierda en España.
La obra, publicada por Editorial Navona, se presenta como un ajuste de cuentas donde Iglesias no escatima en críticas hacia su sucesora. En un capítulo titulado «Yolanda en la corte del rey Felipe», el exlíder de Podemos describe cómo su relación, que comenzó con una fuerte amistad, se ha deteriorado con el tiempo. Iglesias sostiene que Díaz ha «normalizado mentir como estrategia» y que su ascenso al poder ha estado marcado por un creciente narcisismo.
Iglesias recuerda cómo eligió a Yolanda Díaz como su sucesora en 2021, argumentando que era una figura que podría evitar el desgaste de Podemos. Sin embargo, su decepción es palpable al afirmar que Díaz ha tomado un rumbo diferente al que él esperaba. En sus palabras, la relación se fracturó en un evento en Valencia donde Díaz excluyó a las ministras de su propio espacio, lo que Iglesias considera un acto de deslealtad.
El exvicepresidente también critica la transformación de la imagen pública de Díaz, sugiriendo que se ha dejado llevar por la fama y ha cambiado su forma de actuar. Esta crítica se extiende a su comparación con Iñigo Errejón, otro excompañero de Podemos, a quien Iglesias acusa de haber sucumbido a la construcción mediática que busca destruir al partido.
A lo largo del libro, Iglesias se muestra nostálgico por los inicios de Podemos y el movimiento del 15M, contrastando esa época con la actual, donde siente que los límites de lo posible se han estrechado. La editora del libro, Irene Zugasti, aclara en el prólogo que la obra no es una vendetta, sino un intento de explicar la última década de la política española.
Iglesias también aborda la cuestión de la sucesión en Podemos, revelando que Irene Montero, su pareja, era la opción más apoyada para liderar el partido, pero que fue descartada por el temor a la reacción machista que podría provocar su elección. Este punto revela las complejidades de la política de género en España, donde las decisiones estratégicas a menudo se ven influenciadas por consideraciones de este tipo.
En su análisis, Iglesias no se limita a criticar a Díaz, sino que también reflexiona sobre el futuro de la política española. Predice que la carrera política de Yolanda Díaz podría estar llegando a su fin, sugiriendo que podría ser más adecuada para un papel en una fundación o en organizaciones internacionales, en lugar de seguir como diputada. Esta afirmación pone de relieve la incertidumbre que rodea a la figura de Díaz en el contexto político actual.
El libro de Iglesias ha generado un gran revuelo en los círculos políticos y mediáticos, no solo por las críticas directas a Díaz, sino también por la forma en que aborda la historia reciente de Podemos y su propia trayectoria. La obra se convierte en un testimonio de las luchas internas dentro de la izquierda española y de cómo las relaciones personales pueden influir en la política.
La respuesta de Yolanda Díaz no se ha hecho esperar. En declaraciones recientes, ha señalado que «el odio deforma el rostro» y ha criticado a Iglesias por confundir lo personal con lo político. Esta respuesta refleja la tensión que persiste entre ambos líderes y su visión divergente sobre el futuro de la izquierda en España.
El libro «Enemigos íntimos» se presenta como una obra clave para entender las dinámicas de poder dentro de Podemos y el impacto que estas relaciones tienen en la política española. A medida que se acerca el ciclo electoral, las palabras de Iglesias podrían tener repercusiones significativas en la percepción pública de ambos líderes y en el futuro del partido.