La investigación sobre la gestión de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que afectó a la Comunidad Valenciana el pasado 29 de octubre ha revelado nuevos datos significativos. En particular, el listado de llamadas de la exconsellera de Justicia e Interior, Salomé Pradas, ha sido un foco de atención en el desarrollo de la instrucción judicial. Este documento, que ya está en manos de la jueza encargada del caso, proporciona un panorama detallado de las comunicaciones realizadas por Pradas durante la crisis.
Uno de los hallazgos más destacados es que Pradas no logró establecer contacto con el president de la Generalitat, Carlos Mazón, durante un periodo crítico de más de una hora. Según el listado, la última conversación entre ambos antes de este lapso ocurrió a las 17:37 horas, cuando Mazón llamó a Pradas y mantuvieron una breve charla de dos minutos. Posteriormente, Pradas intentó comunicarse con Mazón en varias ocasiones, pero no tuvo éxito.
El informe detalla que entre las 18:30 y las 19:43 horas, Pradas realizó varios intentos de contacto, incluyendo dos llamadas canceladas a las 19:10 y 19:36. Finalmente, lograron hablar nuevamente a las 19:43, justo antes de que se enviara el mensaje de alerta ES-Alert a la población. Este periodo de inactividad en la comunicación ha suscitado preguntas sobre la coordinación y la gestión de la crisis en un momento en que la información era crucial para la respuesta de emergencia.
El listado de llamadas, que abarca 118 páginas, no solo muestra la falta de comunicación con Mazón, sino que también refleja la intensa actividad de Pradas en diferentes ubicaciones, especialmente en el Centro de Emergencias de L’Eliana y el Cecopi. Este aspecto es relevante, ya que indica que, a pesar de la falta de contacto con el president, Pradas estaba activa en la gestión de la emergencia desde otros frentes.
La DANA provocó graves inundaciones y daños en varias localidades, lo que ha llevado a un escrutinio exhaustivo de cómo se manejó la situación por parte de las autoridades. La recopilación de datos sobre las comunicaciones de Pradas es solo una parte de la investigación más amplia que busca entender las decisiones tomadas durante la crisis y las posibles fallas en la respuesta del gobierno.
A medida que la investigación avanza, se espera que se revelen más detalles sobre la gestión de la DANA y cómo las autoridades se comunicaron y coordinaron entre sí. La falta de contacto entre Pradas y Mazón durante un periodo crítico plantea interrogantes sobre la eficacia de la comunicación en situaciones de emergencia y la necesidad de protocolos más robustos para garantizar que los líderes estén informados y puedan actuar de manera efectiva.
Este caso no solo es relevante para la Comunidad Valenciana, sino que también puede tener implicaciones más amplias en la forma en que se gestionan las emergencias en toda España. La transparencia en la investigación y la rendición de cuentas son esenciales para restaurar la confianza pública en las instituciones y asegurar que se tomen las lecciones adecuadas para el futuro.