La Guardia Civil en Extremadura enfrenta una serie de retos y oportunidades que marcan su labor diaria en la región. José Manuel Santiago Marín, actual jefe de la 3ª Zona de la Guardia Civil, ha compartido su visión sobre la seguridad en esta comunidad, destacando la importancia de la colaboración ciudadana y la adaptación a nuevas formas de delincuencia, como la ciberdelincuencia.
**La Seguridad en Extremadura: Un Compromiso Constante**
Desde su llegada a Extremadura, Santiago Marín ha manifestado su compromiso por mantener y, si es posible, aumentar los niveles de seguridad en la región. A pesar de que Extremadura es considerada la zona más segura de España, el jefe de la Guardia Civil reconoce que la violencia de género y la ciberdelincuencia son dos áreas que requieren atención especial.
La violencia de género es un tema que preocupa profundamente a la Guardia Civil. Santiago Marín ha explicado que cada compañía cuenta con un equipo especializado que se dedica a hacer seguimiento de los casos de violencia de género. Este equipo no solo se encarga de la protección de las víctimas, sino que también trabaja en la concienciación y prevención, realizando charlas y estableciendo protocolos de protección para aquellas víctimas que no desean denunciar.
Por otro lado, la ciberdelincuencia ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años. Santiago Marín ha señalado que, mientras los delitos tradicionales se mantienen en cifras aceptables, la criminalidad a través de Internet ha aumentado significativamente, especialmente desde la pandemia. Para abordar este fenómeno, la Guardia Civil ha creado los Equipos @, grupos especializados que ofrecen una respuesta más efectiva a los delitos cibernéticos. Estos equipos están formados por guardias civiles capacitados para manejar situaciones de ciberdelincuencia y, si no logran resolver un caso, lo remiten a la Unidad Orgánica de Policía Judicial.
**Colaboración Ciudadana: Un Pilar Fundamental**
Uno de los aspectos más destacados por Santiago Marín es la colaboración de la sociedad extremeña en la labor de la Guardia Civil. La comunidad es muy consciente de su seguridad y colabora activamente con las autoridades, lo que facilita el trabajo de los agentes. Este apoyo se traduce en una mayor eficacia en la prevención y resolución de delitos, lo que a su vez contribuye a que Extremadura mantenga índices de criminalidad bajos en comparación con otras comunidades autónomas.
La Guardia Civil también ha implementado programas específicos para concienciar a diferentes grupos de la población sobre los riesgos de la ciberdelincuencia. Por ejemplo, el Plan Mayor Seguridad está diseñado para educar a las personas mayores sobre cómo protegerse de estafas en línea. Asimismo, el Plan Menor Seguridad busca informar a los jóvenes sobre los peligros que pueden enfrentar en el entorno digital.
En cuanto a los delitos más comunes en las zonas rurales de Extremadura, Santiago Marín ha mencionado que los robos en el campo son una preocupación constante. Estos robos suelen ser estacionales y están relacionados con la cosecha de productos agrícolas, como la aceituna. Para combatir esta problemática, la Guardia Civil ha establecido equipos ROCA, especializados en la prevención y resolución de robos en el campo.
La situación geográfica de Extremadura, como zona fronteriza, también presenta tanto retos como oportunidades. Aunque históricamente se ha asociado con el contrabando, actualmente no se ha detectado una delincuencia transfronteriza significativa. Sin embargo, la Guardia Civil aprovecha esta situación para fortalecer la colaboración con las autoridades policiales de Portugal, lo que permite un intercambio de información y recursos que beneficia a ambas partes.
La dispersión de la población en Extremadura plantea desafíos adicionales para la Guardia Civil. Para abordar esta situación, se han creado núcleos operativos que permiten mantener una patrulla disponible las 24 horas en diferentes áreas. Esto asegura que, aunque los recursos sean limitados, la Guardia Civil pueda responder de manera efectiva a las necesidades de la comunidad.
En resumen, la labor de la Guardia Civil en Extremadura se caracteriza por un enfoque proactivo y adaptativo ante los desafíos actuales. La colaboración con la ciudadanía y la formación continua de los agentes son elementos clave para mantener la seguridad en la región. Con un compromiso firme hacia la protección de todos los ciudadanos, la Guardia Civil se posiciona como un pilar fundamental en la seguridad de Extremadura.