Frank Cuesta, conocido por su labor en la conservación de animales y su presencia en televisión, atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida. Enfrentándose a acusaciones de estafa y maltrato animal, así como a las secuelas de un cáncer que ha marcado su existencia, Cuesta ha compartido su dolor con sus seguidores en redes sociales. Su refugio, el Santuario Libertad, se ha convertido en su refugio tanto para los animales como para él mismo, pero la tormenta que rodea su vida personal amenaza con desestabilizarlo aún más.
La situación se ha complicado aún más debido a su separación de Yuyee, su exmujer, con quien ha tenido una relación tumultuosa. Tras la salida de Yuyee de la cárcel, las tensiones aumentaron, especialmente en lo que respecta a la custodia de su santuario. Este espacio, que Cuesta ha dedicado a rescatar y rehabilitar animales maltratados, estaba inicialmente a nombre de Yuyee, quien había prometido transferirlo a sus hijos. Sin embargo, tras intensas negociaciones, se llegó a un acuerdo que permitió a Cuesta mantener el santuario, aunque no sin un alto costo financiero.
### Conflictos Legales y Acusaciones
La vida de Cuesta ha estado marcada por conflictos legales que han puesto en jaque su reputación. En un giro inesperado, fue detenido por la supuesta tenencia ilegal de especies protegidas en su refugio. Las autoridades tailandesas, tras recibir una denuncia anónima, realizaron una redada en su santuario, encontrando más de diez animales sin la documentación necesaria. Aunque fue liberado bajo fianza, las repercusiones de este incidente han sido significativas, sumándose a las tres querellas que su exmujer le interpuso, acusándolo de fraude fiscal y otros delitos.
La situación se ha vuelto aún más complicada con la traición de un amigo cercano, Luciano, conocido como Chi. Este antiguo compañero, con quien Cuesta compartió momentos difíciles en la cárcel, ha sido acusado de difamarlo públicamente. Según Cuesta, Chi ha distribuido grabaciones en las que se le escucha hablando de su santuario de manera poco ética, lo que podría acarrearle problemas legales en Tailandia, donde el maltrato animal es severamente castigado. Esta traición ha llevado a Cuesta a tomar medidas drásticas, incluyendo órdenes de alejamiento contra Chi, quien parece haber orquestado una campaña en su contra.
### La Lucha Contra el Cáncer y el Apoyo Familiar
A pesar de las adversidades, la familia de Cuesta se ha mantenido a su lado. Sus tres hijos han mostrado un apoyo incondicional durante este periodo turbulento. Cuesta, que ha estado lidiando con leucemia mielógena crónica desde hace más de dos décadas, ha tenido que enfrentar nuevos tratamientos y hospitalizaciones. Recientemente, sufrió un ataque de una cobra en su santuario, lo que lo llevó nuevamente al hospital, añadiendo más estrés a su ya complicada situación.
El impacto emocional de estos eventos ha sido devastador para Cuesta. En sus redes sociales, ha compartido momentos de vulnerabilidad, expresando su dolor y la carga que siente por las acusaciones y la traición de quienes consideraba amigos. La presión mediática y el escrutinio público han contribuido a lo que él describe como un «asesinato social» de su persona, afectando no solo su bienestar, sino también el de sus seres queridos.
A medida que la situación se desarrolla, Cuesta continúa luchando no solo por su reputación, sino también por el bienestar de los animales que ha dedicado su vida a proteger. Su santuario, que representa su pasión y compromiso con la conservación, se ha convertido en un símbolo de su resistencia ante la adversidad. Sin embargo, el futuro sigue siendo incierto, y las batallas legales y personales que enfrenta podrían tener repercusiones duraderas en su vida y en su labor como defensor de los animales.
En este contexto, la historia de Frank Cuesta es un recordatorio de que, detrás de la fama y el éxito, pueden existir luchas personales profundas. Su capacidad para seguir adelante, a pesar de las dificultades, es un testimonio de su carácter y determinación. La comunidad que lo sigue espera que encuentre la paz y la justicia que tanto merece, mientras continúa su labor en el Santuario Libertad, un lugar que ha sido su hogar y refugio tanto para él como para los animales que rescata.