La reciente celebración de la romería de San Isidro en Monesterio ha dejado una huella imborrable en la comunidad local. En su 82.ª edición, la fiesta se desarrolló del 14 al 19 de mayo de 2025, y según los organizadores, fue un evento caracterizado por la participación masiva y el cumplimiento de las normas establecidas. Virginia Esteban, miembro de la Hermandad de San Isidro Labrador, compartió su satisfacción con el desarrollo de la festividad, destacando que todo transcurrió «con total normalidad y sin incidentes que destacar».
La romería, que incluye un recorrido de 22 kilómetros desde la localidad hasta la pradera, se llevó a cabo el jueves anterior al cierre de las festividades. Este año, la Hermandad implementó una fianza de 100 euros para los carros, lo que ayudó a garantizar el respeto a las normas de seguridad y horarios. La colaboración de la Guardia Civil fue fundamental, especialmente en el cruce de la carretera nacional, donde se establecieron horarios específicos para asegurar que el cruce se realizara con luz del día. La llegada a la pradera estaba programada entre las 20:00 y las 21:15 horas, y el cumplimiento de estos horarios fue un factor clave para el éxito del evento.
La participación fue notable, con 71 carros, carretas, carriolas y tractores, así como centenares de caballistas y romeros a pie. Virginia Esteban subrayó que muchos de los caballistas provenían de localidades cercanas que no cuentan con casetas, lo que permitió que todos disfrutaran de una tarde-noche de romería que no se había visto en años. La ausencia de incidentes y el aumento en el número de casetas, que alcanzó las 80, también fueron aspectos destacados en el balance de la celebración.
La programación de actividades fue variada y atrajo a un gran número de asistentes. Una de las actividades más esperadas fue la actuación musical del sábano, que logró llenar la carpa instalada en el recinto. Este tipo de eventos no solo fomentan la convivencia, sino que también refuerzan el sentido de comunidad entre los asistentes. La Hermandad se mostró agradecida por el comportamiento ejemplar de los romeros y visitantes, señalando que la mayor recompensa a su trabajo es ver disfrutar a la gente.
La limpieza del recinto es otro aspecto importante que la Hermandad se toma muy en serio. Tras la fiesta, se estipuló un plazo hasta el 26 de mayo para dejar la pradera en condiciones óptimas. Las fianzas de las casetas y carros se devolverán los días 27, 28 y 29 de mayo en la sede de las asociaciones, lo que demuestra un compromiso con la responsabilidad y el cuidado del entorno.
Como es tradición, la romería culminó con un acto protocolario de entrega de trofeos y el sorteo de un lote de productos donado por la cooperativa agrícola ganadera San Isidro. Este año, el número agraciado fue el 5.089, y la papeleta ganadora podría estar entre las que la Hermandad regala a sus socios. Este tipo de sorteos no solo añaden un elemento de emoción a la celebración, sino que también fomentan la participación activa de la comunidad.
La romería de San Isidro en Monesterio no solo es un evento religioso, sino que también representa una oportunidad para que la comunidad se una y celebre sus tradiciones. La combinación de actividades culturales, la participación de los vecinos y el respeto por las normas de seguridad han hecho de esta edición un ejemplo a seguir para futuras celebraciones. La Hermandad de San Isidro Labrador ha demostrado que, con una buena organización y el compromiso de todos, es posible llevar a cabo una festividad que no solo respete las tradiciones, sino que también garantice la seguridad y el disfrute de todos los participantes.