La mágica ciudad de Mérida fue testigo de un evento musical que quedará grabado en la memoria de sus habitantes y visitantes. Lori Meyers, la emblemática banda granadina, regresó a este histórico enclave 20 años después, ofreciendo un concierto que fusionó música, emoción y patrimonio en el marco del Stone & Music Festival. La iluminación del Teatro Romano, un monumento que data de la época romana, ya presagiaba que la noche sería especial, y así fue. Desde el primer acorde de ‘Hacerte volar’, el graderío se transformó en un espacio de disfrute colectivo, vibrando con cada nota hasta el cierre apoteósico con ‘Alta fidelidad’.
### Una Noche de Energía y Conexión
La energía en el recinto era palpable desde el inicio del concierto. Decenas de voces se unieron para corear los primeros versos, mientras las manos se alzaban al ritmo de la música. La conexión entre la banda y el público se hizo evidente, creando una comunión perfecta que se reforzaba con cada tema interpretado. Noni, el vocalista, no dudó en expresar su emoción al dirigirse a los asistentes: «Estamos en Mérida por primera vez después de 20 años, perdonad que no hayamos venido antes; estamos en un enclave único». Estas palabras resonaron en el corazón de los presentes, quienes se entregaron por completo a la experiencia.
El escenario, rodeado por las columnas milenarias del Teatro Romano, cobró vida con la potente sonoridad de Lori Meyers, que se vio realzada por una espectacular iluminación y proyecciones visuales que transformaban el ambiente en cada canción. Los acordes de himnos como ‘Planilandia’, ‘Primaveras’, ‘Impronta’, ‘Luces de neón’ y ‘Tokio ya no nos quiere’ desataron la euforia entre los asistentes, quienes no dudaron en cantar y bailar al ritmo de sus melodías.
Uno de los momentos más emotivos de la noche se produjo durante la interpretación de ‘Luciérnagas’. Noni pidió a los asistentes que encendieran las linternas de sus móviles, creando un cielo de luces que iluminó el recinto y añadió un toque de belleza al entorno. Este gesto simbolizó la conexión emocional que la banda ha cultivado con su público a lo largo de los años.
### Recuerdos Musicales y Celebración Colectiva
El repertorio de Lori Meyers no solo hizo vibrar a los presentes, sino que también evocó recuerdos compartidos. Canciones como ‘El tiempo pasará’ y ‘Mi realidad’ fueron recibidas con nostalgia y alegría, recordando a muchos momentos significativos de sus vidas. La música de la banda ha sido la banda sonora de generaciones, y su regreso a Mérida fue una celebración de esos recuerdos.
La recta final del concierto fue un verdadero estallido de energía. Con ‘Emborracharme’, el público se entregó por completo, convirtiendo el Teatro Romano en una fiesta colectiva. La culminación de la noche llegó con ‘Alta fidelidad’, un cierre que dejó a todos los asistentes con una sonrisa en el rostro y el corazón lleno de emociones.
Antes de que comenzara el espectáculo, Miguel Ángel Mendiano, director general de Extremadura Avante, hizo entrega a la banda de la Stone M, una estatuilla que el Stone & Music Festival otorga a los artistas que participan en cada edición. Este reconocimiento simboliza no solo el talento de Lori Meyers, sino también su contribución a la cultura musical de la región.
El regreso de Lori Meyers a Mérida no solo fue un evento musical, sino una experiencia que unió a la comunidad en torno a la música y la emoción. La combinación de un entorno histórico, una banda icónica y un público entregado creó una noche mágica que quedará en la memoria de todos los que tuvieron la suerte de asistir. La música, en su forma más pura, tiene el poder de conectar a las personas, y en Mérida, ese poder se sintió con fuerza durante esta inolvidable velada.