Las operaciones policiales en la costa andaluza han revelado un incremento significativo en la incautación de combustible destinado a narcolanchas, con un aumento del 80% en el primer semestre de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este fenómeno ha sido documentado por el Ministerio del Interior, que ha señalado que se han confiscado 359.248 litros de gasolina entre enero y junio de este año. Este aumento es un reflejo de la intensificación de las operaciones de la Guardia Civil y la Policía Nacional, en el marco del Plan Especial de Seguridad Campo de Gibraltar, diseñado para combatir el narcotráfico en la región.
La situación se ha vuelto crítica, especialmente tras la trágica muerte de dos guardias civiles en febrero de 2024, quienes fueron arrollados por una narcolancha en Barbate, Cádiz. Este incidente llevó a la Secretaría de Estado de Seguridad a establecer un grupo de trabajo junto al Ministerio de Justicia, con el objetivo de reforzar la lucha contra las redes de narcotráfico y sus estructuras logísticas, conocidas como ‘petaqueros’. Estos individuos son responsables de abastecer a las narcolanchas con combustible, utilizando pequeñas embarcaciones de recreo para transportar bidones de gasolina necesarios para las operaciones de tráfico de drogas.
### La Cantera del Narcotráfico: El Papel de los ‘Petaqueros’
Las organizaciones criminales que operan en el sur de España han encontrado en el ‘petaqueo’ una vía crucial para el tráfico de drogas. Las asociaciones profesionales de guardias civiles han advertido que este fenómeno se ha convertido en una especie de cantera para el narcotráfico. Los ‘petaqueros’ no solo suministran combustible, sino que también son parte integral de la logística que permite a las narcolanchas operar con eficacia.
Las Fuerzas de Seguridad han intensificado sus esfuerzos para desmantelar estas redes. Recientemente, la Guardia Civil llevó a cabo una operación en la que se intervinieron 25.000 litros de combustible y diez embarcaciones recreativas, resultando en la detención de 24 personas y la realización de 15 registros. Este tipo de operaciones son cada vez más comunes, reflejando la creciente preocupación por la seguridad en la costa andaluza.
El aumento en las incautaciones de combustible no es un fenómeno aislado. Desde la implementación del Plan Especial de Seguridad Campo de Gibraltar en 2018, las cifras han ido en aumento. En 2024, se incautaron 437.744 litros de combustible, un incremento notable en comparación con los 2.350 litros confiscados en 2018. Este aumento progresivo destaca la efectividad de las operaciones policiales, pero también subraya la persistencia del problema del narcotráfico en la región.
### La Evolución de las Incautaciones de Combustible
Los datos del Ministerio del Interior muestran una tendencia alarmante en las incautaciones de combustible a lo largo de los años. En 2019, las incautaciones aumentaron a 42.581 litros, y en 2020, esta cifra se disparó a 121.825 litros. Tras la pandemia de COVID-19, las cifras continuaron en aumento, alcanzando los 284.854 litros en 2021, 244.565 litros en 2022 y 124.233 litros en 2023. Este patrón sugiere que, a pesar de los esfuerzos de las autoridades, el narcotráfico sigue siendo un problema persistente en la costa andaluza.
La Guardia Civil ha estado trabajando incansablemente para desmantelar las estructuras que apoyan el narcotráfico. En julio de este año, se desarticuló una organización criminal en Cádiz que operaba una ‘narcogasolinera flotante’, capaz de suministrar grandes cantidades de combustible a embarcaciones de alta velocidad. Este tipo de operaciones demuestra la sofisticación de las redes de narcotráfico y la necesidad de una respuesta coordinada y efectiva por parte de las autoridades.
El impacto del narcotráfico en la sociedad andaluza es profundo. Las comunidades locales se ven afectadas no solo por la violencia asociada con estas actividades, sino también por la degradación de la seguridad y la calidad de vida. Las autoridades están bajo presión para abordar este problema de manera integral, no solo mediante la incautación de combustible y la detención de criminales, sino también a través de políticas que aborden las causas subyacentes del narcotráfico.
La lucha contra el narcotráfico en Andalucía es un desafío complejo que requiere un enfoque multifacético. Las operaciones de incautación de combustible son solo una parte de un esfuerzo más amplio para desmantelar las redes criminales que operan en la región. La colaboración entre diferentes agencias de seguridad, así como el apoyo de la comunidad, será crucial para abordar este problema de manera efectiva.
A medida que las autoridades continúan su lucha contra el narcotráfico, el aumento en las incautaciones de combustible destaca la necesidad de una vigilancia constante y de estrategias innovadoras para combatir este fenómeno. La situación en Andalucía es un recordatorio de que el narcotráfico es un problema que no solo afecta a las fuerzas de seguridad, sino a toda la sociedad, y que se requiere un esfuerzo conjunto para erradicarlo.