El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha comparecido ante el juez Juan Carlos Peinado en relación con el nombramiento de Cristina Álvarez, asistente de Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Durante su declaración, que se extendió por más de dos horas, Bolaños aseguró que no participó en el proceso de selección de Álvarez y defendió la legalidad de su designación.
Bolaños afirmó no conocer a Cristina Álvarez antes de su contratación y destacó que la figura de asistente para las esposas de los presidentes del Gobierno es una práctica habitual. Según su testimonio, Begoña Gómez ha tenido un solo asistente, a diferencia de otras primeras damas que han tenido varios. El ministro también explicó que la responsabilidad de tramitar los contratos de libre designación recae en múltiples departamentos de Moncloa.
El juez Peinado investiga a Begoña Gómez por presuntos delitos de corrupción, centrándose en la posible malversación de fondos públicos en relación con la contratación de su asistente. La investigación se ha intensificado tras la aparición de correos electrónicos en los que Álvarez se comunicaba con Reale Seguros, sugiriendo que Gómez estaba interesada en que la aseguradora continuara patrocinando una cátedra en la Universidad Complutense de Madrid.
La declaración de Bolaños se produjo en un contexto de creciente escrutinio sobre la gestión de personal en Moncloa. El juez Peinado ha expresado su interés en conocer quién ordenó la contratación de Álvarez y qué criterios se utilizaron para su selección. En este sentido, Bolaños tuvo que salir brevemente de la sala para consultar el nombre del coordinador de personal, lo que subraya la complejidad del proceso de designación de cargos de confianza en el Gobierno.
La UCO (Unidad Central Operativa) ha reforzado la investigación sobre Begoña Gómez, lo que ha llevado a especulaciones sobre la posibilidad de que el caso sea elevado al Tribunal Supremo si se encuentran indicios de delito que involucren a miembros del Ejecutivo. En este sentido, cualquier remisión al Supremo requeriría una exposición razonada y la aprobación de las Cortes, dado que Bolaños es un alto cargo del Gobierno.
La comparecencia de Bolaños se acordó tras las declaraciones previas de Álvarez y del vicesecretario general de la Presidencia, Alfredo González Gómez, quien propuso su nombramiento. González también admitió no conocer a Álvarez antes de su designación, lo que ha generado dudas sobre el proceso de selección de personal en Moncloa.
El juez Peinado ha tomado medidas para garantizar la seguridad durante las declaraciones, incluyendo la disposición de un coche oficial con chófer para el traslado de los testigos. Además, ha impuesto multas a los abogados que han compartido información sobre el caso con la prensa, lo que ha suscitado críticas sobre la transparencia del proceso judicial.
La situación en torno a Begoña Gómez y su asistente ha captado la atención mediática y pública, no solo por las implicaciones legales, sino también por el impacto que podría tener en la imagen del Gobierno de Pedro Sánchez. A medida que avanza la investigación, se espera que surjan más detalles sobre la gestión de personal en Moncloa y las prácticas de contratación de cargos de confianza.
En resumen, las declaraciones de Félix Bolaños ante el juez Peinado han puesto de relieve la complejidad del caso que involucra a Begoña Gómez y su asistente, así como las posibles repercusiones legales para el Gobierno. La investigación continúa, y se espera que se tomen decisiones importantes en los próximos días.