La situación actual de Redeia, la compañía encargada de operar el sistema eléctrico español y gestionar el transporte de luz en alta tensión, ha suscitado un gran interés debido a sus recientes resultados financieros y a la controversia en torno a su gestión. En este artículo, exploraremos los aspectos más relevantes de la compañía, incluyendo sus resultados económicos y las implicaciones del apagón ocurrido en abril de 2025.
**Resultados Financieros y Desempeño Económico**
En los primeros nueve meses de 2025, Redeia ha reportado un incremento en sus ingresos del 2,5%, alcanzando un total de 1.218,1 millones de euros. Este crecimiento se ha visto impulsado principalmente por la gestión y operación de infraestructuras eléctricas nacionales, que aportaron 1.073,1 millones, lo que representa un aumento del 3,2%. Además, la transmisión eléctrica internacional y los resultados de las sociedades participadas sumaron 104,3 millones, mientras que la fibra óptica contribuyó con 111,8 millones.
Sin embargo, a pesar de estos incrementos en ingresos, el beneficio neto ha experimentado una caída del 4,6%, situándose en 389,8 millones de euros. Este descenso es particularmente preocupante, ya que se produce en un contexto donde la deuda financiera neta ha crecido un 13,3%, alcanzando los 6.083,4 millones de euros. Este aumento en la deuda se atribuye a un fuerte impulso en las inversiones, que alcanzaron los 967,5 millones, un 47,6% más que en el periodo anterior. De estas inversiones, 915 millones se destinaron a la filial Red Eléctrica, que se encarga de la operación del sistema y del transporte de luz, con un objetivo de alcanzar los 1.400 millones en inversiones para el año.
A pesar de la disminución en el beneficio neto y el aumento de la deuda, Redeia ha decidido aprobar un dividendo de 0,20 euros por acción, que se abonará en enero del próximo año. Sin embargo, esta decisión no ha sido bien recibida en el mercado, ya que la cotización de la compañía ha caído un 0,24%, en contraste con un aumento del 0,65% del índice Ibex 35. Además, en los últimos seis meses, la acción de Redeia ha acumulado una depreciación del 13%, lo que refleja la desconfianza de los inversores en la gestión actual de la compañía.
**Controversia del Apagón y Responsabilidades**
Uno de los temas más polémicos que rodea a Redeia es el apagón que tuvo lugar el 28 de abril de 2025. La presidenta de la compañía, Beatriz Corredor, ha sido objeto de críticas por su gestión y por la falta de provisiones ante este incidente. A pesar de las acusaciones, Corredor ha mantenido su postura, insistiendo en que no tiene culpa del apagón y atribuyendo la responsabilidad a las eléctricas. Esta situación ha llevado a que Iberdrola, una de las principales eléctricas del país, haya presentado una demanda contra Corredor, argumentando que el origen del apagón se encuentra en una planta fotovoltaica de alta potencia en Badajoz.
La controversia se ha intensificado con las declaraciones de otros altos funcionarios de Redeia, quienes también han señalado la planta de Badajoz como un factor clave en el apagón. Concepción Sánchez, directora general de Operación de Red Eléctrica, respaldó esta afirmación durante su comparecencia en la comisión de investigación del Senado. A pesar de las investigaciones en curso, los administradores de Redeia han estimado que el incidente no implicará la salida de recursos del grupo en el futuro, aunque esta estimación podría cambiar dependiendo de los resultados de las investigaciones.
El hecho de que el Estado posea el 20% del capital de Redeia añade una capa adicional de complejidad a la situación. Cualquier repercusión financiera derivada del apagón podría terminar afectando a los contribuyentes, lo que ha generado un debate sobre la responsabilidad de la gestión pública en la compañía.
En resumen, Redeia se enfrenta a un panorama complicado, con resultados financieros que no cumplen las expectativas y una controversia significativa en torno a su gestión y responsabilidad en el apagón. La combinación de un aumento en la deuda, una caída en el beneficio neto y la presión de las demandas legales plantea serios desafíos para la compañía en el futuro. La forma en que Redeia maneje estas situaciones será crucial para restaurar la confianza de los inversores y garantizar su estabilidad a largo plazo.
