En los últimos años, el español ha cobrado una relevancia significativa en el ámbito de la diplomacia internacional. Con más de 500 millones de hablantes nativos, se ha consolidado como la segunda lengua materna más hablada en el mundo y como un idioma oficial en tres continentes: Europa, América y África. Esta realidad ha llevado a que el Gobierno español, bajo la dirección del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, intensifique sus esfuerzos para promover el uso del español en la diplomacia multilateral. Este artículo explora las iniciativas recientes y el impacto del español en el contexto internacional.
La promoción del español como lengua de trabajo en organismos internacionales es un objetivo clave para España. En este sentido, se han establecido nuevos ‘Grupos de Amigos del Español’ (GAE) en lugares estratégicos como La Haya y la OCDE. Estos grupos tienen como finalidad actuar de manera concertada para consolidar el español como un idioma de referencia en el ámbito jurídico internacional y en la economía global. La creación de estos grupos no solo refuerza la presencia del español en foros internacionales, sino que también busca fomentar un diálogo más inclusivo y diverso en la diplomacia.
### La Importancia del Español en la Diplomacia Internacional
El español no solo es un idioma hablado por millones, sino que también es un activo clave en la política exterior de España. La creación de la Dirección General del Español en el Mundo hace cuatro años es un claro ejemplo de este compromiso. Esta dirección se encarga de coordinar las acciones para promover el español a nivel global, destacando su papel como herramienta de diplomacia y cooperación.
En un mundo donde el multilateralismo es cada vez más necesario, el español se presenta como un vehículo para el diálogo y la paz. La reciente creación del GAE en la OCDE, que se formalizó el 22 de julio, es un paso significativo en esta dirección. Los delegados permanentes de los Estados miembros hispanohablantes, como Chile, Colombia, Costa Rica, España y México, han reafirmado su compromiso con la promoción del español en este organismo, que por primera vez llevará a cabo un estudio técnico sobre el impacto económico del español a nivel global.
Además, el GAE en La Haya, resultado del acuerdo de 17 países hispanohablantes, busca promover el uso del español en los organismos internacionales con sede en esta ciudad. Este grupo tiene como objetivo replicar éxitos anteriores, como el reconocimiento del español como lengua oficial de trabajo en la Conferencia de La Haya de Derecho Internacional Privado desde julio de 2024.
### Iniciativas y Acuerdos para la Promoción del Español
El compromiso de España con la promoción del español se ha materializado en la firma de 12 memorandos de entendimiento con países iberoamericanos en el último año y medio. Estos acuerdos subrayan la importancia del español como lengua oficial de las Naciones Unidas y su carácter global. A través de estos memorandos, se busca fortalecer los diferentes GAE existentes y crear nuevos grupos que faciliten una acción concertada entre los países hispanohablantes en el ámbito multilateral.
Un ejemplo notable de esta colaboración es el ‘Círculo Ñ’ de la Organización de Estados Americanos (OEA), que fue creado el año pasado. Este grupo ha logrado importantes avances, como la declaración de apoyo del Consejo Permanente de la OEA a la campaña de oficialización del español en la Corte Internacional de Justicia. Además, en la reciente Asamblea General de la OEA, se estableció la ‘Semana Internacional del Idioma Español’, que se celebrará anualmente en abril, promoviendo así la cultura y el idioma español en el continente americano.
La promoción del español en la diplomacia no solo se limita a la creación de grupos y memorandos. También implica un esfuerzo continuo por parte de España para intensificar la actividad de los GAE existentes y fomentar la creación de nuevos grupos. Este enfoque proactivo es esencial para asegurar que el español siga siendo un idioma relevante en las discusiones y decisiones que afectan a la comunidad internacional.
El español, como lengua de trabajo en organismos internacionales, no solo facilita la comunicación entre países hispanohablantes, sino que también enriquece el diálogo global al incorporar diversas perspectivas culturales y lingüísticas. En un contexto internacional cada vez más complejo, la diversidad lingüística se convierte en un activo invaluable para la cooperación y el entendimiento mutuo.
En resumen, el compromiso de España con la promoción del español en la diplomacia multilateral es un reflejo de la importancia que se le otorga a este idioma en el escenario global. A medida que se intensifican los esfuerzos para consolidar el español como lengua de referencia en el ámbito jurídico y económico, se abre un nuevo capítulo en la historia de la diplomacia, donde el español no solo es un medio de comunicación, sino también un símbolo de unidad y cooperación entre naciones.