El cierre de Relevo marca el final de una era en el periodismo deportivo en España. Durante tres años, este medio se destacó por su enfoque innovador y su capacidad para conectar con la audiencia a través de las redes sociales. Desde su lanzamiento, Relevo se propuso romper moldes y ofrecer un contenido fresco y atractivo, lo que le permitió ganar rápidamente una base de seguidores leales. Sin embargo, el camino no estuvo exento de desafíos y críticas, lo que hace que su historia sea aún más fascinante.
### Innovación en el Periodismo Deportivo
Relevo nació con una premisa única: priorizar las redes sociales antes que la web tradicional. Esta estrategia se tradujo en un enfoque audaz que permitió a los redactores publicar su primera noticia en Twitter, un fichaje del Real Madrid de baloncesto, antes de que existiera un enlace en su sitio web. Este enfoque rompió con la norma de los medios tradicionales y demostró que la inmediatez y la interacción con la audiencia eran fundamentales en el panorama digital actual.
La apuesta inicial fue un éxito rotundo. En su primer día, Relevo superó los 30,000 seguidores en Twitter, lo que llevó a la dirección a celebrar con un regalo al equipo. Este tipo de conexión con la audiencia fue clave para el crecimiento del medio, que se convirtió en un referente en plataformas como TikTok, donde su estrategia de contenido resonó con un público más joven. La decisión de renunciar a Facebook en favor de TikTok, liderada por Fermín Elizari, fue una jugada visionaria que consolidó a Relevo como líder en la red social de más rápido crecimiento.
A lo largo de su trayectoria, Relevo introdujo formatos innovadores que ahora son comunes en otros medios, como los explainers en TikTok y las entrevistas en formato vintage. Estos nuevos enfoques no solo diversificaron el contenido, sino que también ayudaron a los redactores a desarrollar habilidades en narración visual y producción de video, lo que les permitió conectar de manera más efectiva con su audiencia.
### Desafíos y Críticas en el Camino
A pesar de su éxito, Relevo no estuvo exento de críticas. Desde su anuncio de cierre, surgieron comentarios negativos que reflejaban la polarización en el mundo del deporte. Algunos lo consideraron un «panfleto culé» o un «panfleto madridista», dependiendo de la perspectiva de cada uno. Esta polarización evidenció la dificultad de mantener una línea editorial neutral en un entorno tan apasionado como el del deporte.
Además, el periodismo deportivo a menudo enfrenta el desafío de contar historias que pueden incomodar a ciertos sectores, especialmente en el ámbito del fútbol. Los redactores de Relevo tuvieron que lidiar con el miedo a represalias y la presión de los clubes, lo que hizo que algunos se sintieran limitados en su capacidad para informar. Sin embargo, a pesar de estos obstáculos, el equipo logró convertirse en un referente del fútbol femenino, destacando historias que resonaron con millones de lectores y espectadores.
Las dos noticias más vistas en la historia de Relevo fueron protagonizadas por mujeres, lo que subraya la importancia de dar visibilidad a las deportistas y sus logros. La cobertura de eventos como el Mundial de fútbol femenino y las historias de figuras como Virginia Torrecilla y Carolina Marín demostraron que el interés por el deporte femenino está en aumento y que hay un público ávido de contenido relevante y bien narrado.
El viaje de Relevo también estuvo marcado por anécdotas memorables y momentos de tensión. Desde cubrir mundiales y eurocopas hasta enfrentarse a situaciones inesperadas, como el robo de un pasaporte en Nueva Zelanda, los redactores vivieron experiencias que quedarán grabadas en su memoria. Estas vivencias no solo enriquecieron su carrera profesional, sino que también forjaron lazos entre los miembros del equipo, creando un sentido de comunidad que perdurará más allá del cierre del medio.
En resumen, Relevo no solo fue un medio de comunicación; fue un espacio donde se experimentó la evolución del periodismo deportivo en un entorno digital. Su legado perdurará en la forma en que se cuenta el deporte, en la visibilidad que se ha dado a las mujeres en el ámbito deportivo y en la conexión que se ha logrado con una audiencia diversa y comprometida. Aunque su historia llega a su fin, el impacto de Relevo en el periodismo deportivo y en la cultura deportiva en general es innegable.