La reciente cumbre de Comercio en Bruselas ha puesto de manifiesto la necesidad de una respuesta unificada de la Unión Europea (UE) ante los aranceles impuestos por Estados Unidos. El ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, ha abogado por un enfoque que combine la negociación con la defensa de los intereses europeos, destacando la importancia de proteger a las industrias más afectadas por las políticas comerciales de la administración Trump.
Cuerpo ha enfatizado que la UE debe desplegar un «paraguas de protección» para las empresas más vulnerables, similar al plan económico español que busca mitigar el impacto de la crisis comercial. Este plan, valorado en 14.100 millones de euros, incluye ayudas, avales y financiación para las empresas expuestas a los aranceles estadounidenses. El ministro ha subrayado que Europa tiene la competencia en materia arancelaria y que los ingresos generados por posibles contraaranceles deberían revertir en su presupuesto.
La cumbre ha revelado una división entre los Estados miembros, algunos de los cuales prefieren una postura más conciliadora, mientras que otros abogan por represalias. Cuerpo se ha posicionado como un defensor de la negociación, argumentando que la relación comercial entre Europa y EE.UU. es crucial y que la UE no busca un conflicto, sino una respuesta justa y proporcionada a las medidas estadounidenses.
Además, el ministro ha resaltado la importancia de diversificar los mercados para reducir la dependencia de la política comercial estadounidense. En este sentido, ha instado a avanzar en acuerdos comerciales con socios estratégicos, como el bloque de Mercosur, que podría incrementar significativamente las exportaciones de productos europeos como el vino y el aceite de oliva. Cuerpo ha manifestado su deseo de que el acuerdo con Mercosur esté listo para su ratificación antes de finalizar el año, lo que podría ofrecer una salida a las industrias afectadas por los aranceles.
La situación actual también ha sido vista como una oportunidad para fortalecer la presencia europea en mercados emergentes, como Asia, donde se pueden establecer relaciones comerciales más sólidas. Cuerpo ha destacado que, aunque la diversificación es una estrategia a largo plazo, es esencial comenzar a implementarla de inmediato para proteger a las industrias europeas.
En resumen, la cumbre de Comercio ha sido un momento clave para discutir la estrategia europea frente a los aranceles de EE.UU. La propuesta de Cuerpo de un enfoque equilibrado entre negociación y protección de las industrias más afectadas refleja la complejidad de la situación actual y la necesidad de una respuesta coordinada y efectiva por parte de la UE.