La política en la Comunidad Valenciana está experimentando un resurgimiento inesperado con la figura de Francisco Camps tomando protagonismo en un momento de debilidad para el actual presidente del Partido Popular (PP) valenciano, Carlos Mazón. Este fenómeno se ha intensificado con la convocatoria de un gran acto para conmemorar los 30 años de la primera victoria del PP en la región, un evento que promete ser un punto de inflexión en la dinámica interna del partido.
La reaparición de Camps, ex presidente de la Generalitat, no es simplemente un acto de nostalgia. Desde que fue absuelto en el último juicio relacionado con la trama Gürtel, ha estado en una gira por la Comunidad Valenciana, buscando reafirmar su relevancia política. En sus discursos, Camps ha enfatizado la necesidad de recuperar la grandeza del PP, un mensaje que resuena con muchos de los militantes que añoran los tiempos en que el partido gobernaba sin interrupciones.
### La Nostalgia del Viejo PP
El evento que se llevará a cabo en el emblemático edificio Veles e Vents de Valencia es más que una celebración; es una estrategia para reactivar a un sector del partido que se siente marginado. Camps ha utilizado sus redes sociales para promocionar este acto, donde se espera la asistencia de numerosos militantes y figuras históricas del PP, como Sonia Castedo y Carlos Fabra. Este regreso a la primera línea política se produce en un contexto donde Mazón enfrenta críticas por su gestión, especialmente tras la tragedia de la DANA que dejó 228 fallecidos en Valencia.
La situación actual del PP valenciano es complicada. Mazón, quien asumió el liderazgo del partido en 2021, ha sido cuestionado por su papel durante la crisis y su capacidad para liderar en tiempos difíciles. A pesar de haber logrado un acuerdo con Vox para aprobar los presupuestos de la Generalitat, su posición se ha visto debilitada por la presión interna y externa. En este contexto, la figura de Camps se presenta como una alternativa que podría agitar las aguas del partido.
Camps ha dejado claro que su intención es volver a la política activa, y ha solicitado a la dirección nacional del PP que convoque un congreso regional para decidir el futuro del liderazgo en la Comunidad Valenciana. Sin embargo, esta convocatoria ha sido aplazada hasta 2026, lo que ha generado especulaciones sobre la verdadera intención detrás de esta decisión. Muchos en el partido consideran que sería un error subestimar a Camps, quien ha demostrado tener la capacidad de movilizar a la base del partido.
### La Guerra de Familias en el PP Valenciano
La lucha por el control del PP valenciano ha desencadenado una guerra de familias, donde las lealtades y las alianzas están en constante cambio. La figura de Camps, que representa el ‘viejo’ PP, se enfrenta a la nueva generación liderada por Mazón. Este conflicto interno ha llevado a que algunos miembros del partido se pregunten si es posible una reconciliación entre ambas facciones o si, por el contrario, se profundizará la división.
El hecho de que Camps esté recibiendo apoyo de figuras históricas del partido sugiere que hay un sector que anhela volver a los tiempos de gloria del PP. Sin embargo, la actual dirección del partido parece decidida a ignorar sus movimientos, confiando en que la lealtad a Mazón prevalecerá. A pesar de esto, hay voces dentro del PP que advierten sobre el peligro de despreciar a Camps, quien ha demostrado ser un líder carismático y capaz de atraer a los votantes.
La situación se complica aún más por la necesidad de Mazón de mantener una alianza con Vox, lo que limita su capacidad para actuar de manera independiente. En este sentido, Camps podría representar una amenaza para la estabilidad de Mazón, especialmente si logra consolidar un apoyo significativo entre los militantes del PP. La presión sobre Mazón para que renuncie o para que convoque elecciones anticipadas podría aumentar si la situación no mejora.
En resumen, la política en la Comunidad Valenciana está en un momento crucial. La reaparición de Francisco Camps y su intento de reactivar al ‘viejo’ PP podría cambiar el rumbo del partido en la región. Mientras tanto, Carlos Mazón deberá navegar por un terreno complicado, donde las lealtades están en juego y el futuro del PP valenciano pende de un hilo.