El incendio forestal que se desató en Jarilla ha alcanzado dimensiones alarmantes, convirtiéndose en el más devastador del año en la región. Con un total de 4.625 hectáreas calcinadas y un perímetro que se extiende a lo largo de 48 kilómetros, la situación ha llevado a las autoridades a tomar medidas drásticas para proteger a la población y controlar el avance de las llamas. Desde su inicio, el fuego ha evolucionado hacia las localidades de Villar de Plasencia y Cabezabellosa, en un área marcada por un terreno difícil y condiciones meteorológicas adversas, incluyendo fuertes vientos que han complicado aún más las labores de extinción.
La madrugada del miércoles al jueves, el incendio obligó a confinar a los habitantes de Oliva de Plasencia y a cerrar tramos de la Autovía de la Plata (A-66), afectando gravemente la movilidad en la región. Según el consejero de Presidencia, Interior y Diálogo Social, Abel Bautista, la labor de los equipos de emergencia ha sido encomiable, ya que las llamas han destruido dos casas en Jarilla, pero se han evitado más pérdidas gracias a la rápida intervención de los servicios de emergencia.
### Evacuaciones y Rescates en Situaciones Críticas
El incendio comenzó el martes, cuando rayos de tormentas provocaron el inicio de este devastador fuego. A las 19:15 horas, se declaró el nivel 1 de peligrosidad, y la simultaneidad de incendios en la región llevó a las autoridades a elevar el nivel de operatividad a 2. Esto significó que se solicitó la intervención de la Unidad Militar de Emergencia (UME) para ayudar en las labores de extinción. Durante la noche, se llevaron a cabo evacuaciones masivas, afectando a aproximadamente 700 personas en Jarilla, Villar de Plasencia y Cabezabellosa. Sin embargo, algunos vecinos se negaron a abandonar sus hogares, lo que generó una situación de riesgo considerable.
El miércoles, el fuego rodeó a Cabezabellosa, lo que llevó a un angustioso rescate de 19 vecinos que habían quedado atrapados. Un convoy de emergencia logró ingresar al pueblo y evacuar a los residentes, llevándolos a un lugar seguro en Plasencia. Actualmente, los evacuados están siendo alojados en diferentes instalaciones, incluyendo la ciudad deportiva La Bombonera y residencias de ancianos. La Guardia Civil ha advertido que no se descartan nuevas evacuaciones, especialmente en localidades cercanas que podrían verse amenazadas por el avance del fuego.
### Estrategias de Contención y Despliegue de Recursos
Ante la gravedad de la situación, se ha declarado el nivel 2 del Plan Especial de Protección Civil ante Incendios Forestales (INFOCAEX) para toda Extremadura. En este momento, hay cuatro incendios activos en la región, además del de Jarilla, aunque los otros tres se encuentran estabilizados. Sin embargo, el incendio de Jarilla sigue descontrolado, lo que ha llevado a las autoridades a establecer líneas de contención para evitar que las llamas se extiendan hacia otras áreas, como Valcorchero y Casas del Monte.
El dispositivo de emergencia ha movilizado a más de 300 efectivos, incluyendo bomberos forestales, agentes del medio natural y técnicos de extinción, así como 12 medios aéreos que están trabajando intensamente para controlar el fuego. Las condiciones meteorológicas han sido un factor crítico, con temperaturas que alcanzan hasta 41 grados y vientos que superan los 50 km/h, lo que ha dificultado aún más las labores de extinción. Las autoridades han instado a la población a seguir las recomendaciones y a mantener la máxima precaución en las zonas afectadas.
El consejero Bautista ha expresado su confianza en que las estrategias implementadas por el Centro de Coordinación de Emergencias (Cecopi) sean efectivas para contener el fuego. Además, ha agradecido la colaboración de otras comunidades autónomas que han ofrecido recursos y apoyo en esta crisis. La presidenta de la Junta también ha hecho un llamado a la unidad y a la colaboración de la población, enfatizando que la seguridad de las personas es la prioridad en esta situación crítica.
La lucha contra el incendio en Jarilla continúa, y las autoridades están trabajando incansablemente para controlar la situación y proteger a los ciudadanos. La comunidad se mantiene unida en estos momentos difíciles, esperando que las condiciones mejoren y que pronto se pueda dar por controlado este devastador incendio.