El cambio es un concepto que a menudo se asocia con el éxito y la evolución personal. En el caso de Sonsoles Ónega, una de las presentadoras más reconocidas de la televisión española, esta transformación ha sido tanto física como emocional. A lo largo de su carrera, ha experimentado diversas etapas que han moldeado no solo su imagen, sino también su forma de ver la vida y su profesión. Desde su icónico flequillo hasta su reciente cambio de look, cada decisión ha estado marcada por momentos significativos en su vida personal.
### Un Viaje de Autodescubrimiento
Sonsoles Ónega nació en Madrid hace 47 años en el seno de una familia con una fuerte vocación periodística. Desde joven, se sintió atraída por el mundo de la comunicación, lo que la llevó a estudiar Periodismo en la Universidad CEU San Pablo. Su carrera comenzó en CNN+, y posteriormente se trasladó a Cuatro y Telecinco, donde se destacó como cronista parlamentaria en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, su vida dio un giro inesperado cuando a su hijo Gonzalo le diagnosticaron diabetes. Este acontecimiento fue un punto de inflexión que la llevó a replantearse su estilo de vida y a adoptar hábitos más saludables.
La decisión de cambiar su alimentación fue radical: eliminó todos los productos que contenían más de 10 gramos de azúcar por cada 100 gramos. Este cambio no solo tuvo un impacto en su salud física, resultando en una pérdida de peso notable, sino que también le otorgó una nueva perspectiva sobre la vida. Sonsoles comenzó a practicar deporte regularmente, integrando actividades como el running y el entrenamiento funcional en su rutina diaria. Esta transformación no solo se reflejó en su figura, sino también en su rostro, que adquirió una apariencia más fresca y luminosa.
### Un Nuevo Look y una Nueva Vida
El aspecto físico de Sonsoles ha sido siempre un tema de conversación. Durante años, su flequillo fue su sello distintivo, un elemento que la hacía fácilmente reconocible en la televisión. Sin embargo, en marzo de 2025, sorprendió a sus seguidores con un nuevo corte de pelo: una versión renovada del pixie que le daba un aire más sofisticado y moderno. Este cambio fue diseñado por su peluquera de confianza, Marina Navajas, quien creó un estilo versátil que le permite alternar entre diferentes peinados según su estado de ánimo.
La reacción del público fue abrumadora. Comentarios como «Está más guapa, le hace la cara más fina» inundaron las redes sociales, reflejando la admiración que genera su figura pública. Pero el cambio de look de Sonsoles no es solo superficial; simboliza una transformación más profunda en su vida personal y profesional. Tras su separación, encontró una nueva libertad creativa que le ha permitido explorar diferentes facetas de su carrera. Esta etapa de su vida se ha caracterizado por una mayor independencia y confianza en sí misma, lo que se traduce en una mayor seguridad al expresarse tanto en televisión como en sus escritos.
Sonsoles ha sabido equilibrar su vida familiar y profesional, priorizando lo esencial y creando un entorno más consciente y equilibrado. Su trabajo en Antena 3 ha sido un nuevo capítulo en su carrera, donde ha podido mostrar una faceta más auténtica y libre. La disciplina que aplica a su alimentación y ejercicio se refleja también en su enfoque hacia la planificación y creatividad en su trabajo, lo que le ha permitido mantener una coherencia entre su vida personal y profesional.
La transformación de Sonsoles Ónega es un claro ejemplo de cómo los cambios en la vida pueden influir en nuestra imagen y en nuestra forma de ser. Su historia es inspiradora y muestra que, a veces, los momentos difíciles pueden ser el catalizador para un renacer personal. A medida que avanza en su carrera y en su vida, Sonsoles continúa siendo un referente para muchos, no solo por su profesionalismo, sino también por su capacidad de adaptación y crecimiento personal.