La presidenta de la Asociación de Víctimas Mortales 29-O, Rosa Álvarez, ha comparecido ante la comisión del Congreso que investiga la gestión de la dana en Valencia. Durante su intervención, Álvarez expresó su dolor y frustración por la falta de responsabilidad de los políticos en la tragedia que afectó a su comunidad. A pesar de la dimisión del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, que ella considera un «alivio moral», Álvarez subrayó que esto no mitiga el sufrimiento de las víctimas. La presidenta de la asociación agradeció la creación de la comisión, a pesar de la oposición de algunos partidos, y destacó la importancia de que las víctimas tuvieran la oportunidad de hablar y ser escuchadas.
Álvarez comenzó su discurso recordando que los políticos de la Comunidad Valenciana tenían las herramientas necesarias para gestionar emergencias, pero fallaron en su deber. «No mató el clima, mató la mala gestión», afirmó, enfatizando que la falta de previsión y respeto por la ciencia fueron factores determinantes en la tragedia. La presidenta de la asociación también hizo un llamado a la acción, instando a que la comisión no solo sirviera para condenar a nadie, sino para implementar medidas que eviten que situaciones similares se repitan en el futuro.
### La Dimisión de Mazón: Un Paso Hacia la Justicia
La dimisión de Carlos Mazón fue recibida por Álvarez como un signo de que la lucha de las víctimas está dando frutos. «Es una victoria social», afirmó, resaltando que la presión de la comunidad y las manifestaciones han llevado a un cambio significativo. Sin embargo, Álvarez no se detiene ahí; su objetivo es que Mazón enfrente la justicia por su papel en la tragedia. «Estamos más cerca de que pague por sus inacciones», dijo, mientras se preguntaba cuántas vidas más deben perderse para que los responsables reconozcan sus errores.
La presidenta de la asociación también hizo hincapié en la importancia de recordar a las víctimas como personas, no como cifras. «No quiero que a mi padre, Manuel ‘El Barbero’, ni a los demás se les reduzca a un número», expresó, enfatizando que su lucha es para que las muertes no queden impunes. La voz de Álvarez resonó en el Congreso, donde su testimonio busca no solo justicia, sino también un cambio en la forma en que se gestionan las emergencias en la Comunidad Valenciana.
### La Promesa de la Comisión
Carmen Martínez Ramírez, presidenta de la comisión, abrió la sesión con la esperanza de que su trabajo sirva para brindar un poco de consuelo a las víctimas, aunque reconoció que la justicia puede ser difícil de alcanzar. Martínez prometió que la comisión sería un espacio de escucha y reconocimiento, donde se arrojaría luz sobre los eventos del día de la tragedia. La presidenta de la comisión subrayó que el Congreso tiene un deber institucional de escuchar a los afectados, quienes han ganado su derecho a ser escuchados por pura humanidad.
La sesión se anticipa como un momento tenso, y Martínez pidió a los comisionados que estén a la altura de las circunstancias. La lucha de las víctimas por justicia y reconocimiento es un tema que resuena profundamente en la sociedad, y la comisión se convierte en un escenario crucial para que sus voces sean escuchadas. La presidenta de la asociación, Rosa Álvarez, continúa su lucha, no solo por su padre y los demás fallecidos, sino por un cambio real en la gestión de emergencias que garantice que tragedias como la de la dana no se repitan. La presión social y el clamor por justicia son más fuertes que nunca, y la esperanza de que se tomen medidas concretas para proteger a la comunidad se mantiene viva.
