El Congreso de los Diputados en España está en proceso de implementar nuevas normativas que regularán las visitas a la institución, con el objetivo de mejorar la gestión y el control de los grupos que acceden a sus instalaciones. Esta decisión surge tras un notable aumento en el número de visitas organizadas por los propios diputados, lo que ha generado problemas logísticos y de seguridad. La propuesta de regulación busca establecer un marco claro que garantice tanto la protección del patrimonio histórico como la seguridad de los visitantes y del personal del Congreso.
### Aumento de Visitas y Problemas Logísticos
En los últimos años, el número de ciudadanos que visitan el Congreso ha crecido significativamente. En 2024, se registraron casi 4,000 visitantes en visitas guiadas y jornadas de puertas abiertas. Sin embargo, este incremento ha traído consigo una serie de desafíos. Muchos grupos llegan sin previo aviso o con poca antelación, lo que complica la organización y el control de las visitas. Los trabajadores del Congreso han expresado su preocupación por la falta de coordinación, que ha llevado a situaciones de saturación y, en algunos casos, a daños en el patrimonio de la institución.
Los daños más comunes se han registrado en los escaños y escritorios, donde se ha observado vandalismo durante algunas de estas visitas. Además, el autoservicio del Congreso, que es utilizado por diputados y personal, ha sufrido colapsos debido a la afluencia inesperada de visitantes. Ante esta situación, la Mesa del Congreso ha decidido actuar y ha comenzado a trabajar en un borrador de normas que regularán el acceso y la gestión de las visitas.
### Responsabilidad de los Diputados y Nuevas Normas
Una de las principales propuestas de la nueva normativa es que los diputados asuman la responsabilidad por los daños que puedan causar sus invitados. Esto implica que, en caso de que se produzcan incidentes durante una visita, la entidad que solicitó el acceso será la responsable de reparar los daños. Esta medida busca fomentar una mayor responsabilidad entre los diputados y asegurar que se tomen las precauciones necesarias al organizar visitas.
El borrador también sugiere limitar el número de visitantes por diputado a un máximo de doce personas. Aunque no será necesaria la presencia de un guía para estos grupos, se espera que el diputado esté presente y asuma la responsabilidad de la visita. Para facilitar la coordinación, se recomienda que los diputados informen con antelación a la Dirección de Relaciones Institucionales sobre sus intenciones de recibir grupos.
Además, se establecerán restricciones sobre el acceso a ciertas áreas del Congreso. Los visitantes no podrán ingresar a zonas de uso restringido ni utilizar el autoservicio en días de sesiones plenarias, a menos que cuenten con una autorización específica. Estas medidas buscan no solo proteger el patrimonio, sino también garantizar el normal funcionamiento de las actividades parlamentarias.
### Normas de Conducta para los Visitantes
El nuevo marco normativo también incluirá directrices claras sobre la conducta que deben seguir los visitantes durante su estancia en el Congreso. Se prohibirá el acceso con objetos punzantes o líquidos, y se establecerá que los visitantes deben permanecer junto a su grupo y seguir las instrucciones del guía en todo momento. Asimismo, se prohibirá tocar el mobiliario histórico o institucional, así como acceder a la Mesa o a los escaños del Hemiciclo.
La regulación también contempla que todas las visitas deberán ser gestionadas a través de la Unidad de Guías del Congreso. En caso de que algún visitante cause daños o incumpla las normas, la responsabilidad recaerá en la persona o institución que solicitó la visita, lo que permitirá reclamar los daños y perjuicios causados.
Por último, se regulará la asistencia del público a las sesiones plenarias, que requerirá una reserva previa y estará limitada a personas mayores de 16 años o estudiantes que estén cursando al menos el primer curso de Bachillerato. Estas medidas buscan no solo mejorar la experiencia de los visitantes, sino también proteger la integridad y el funcionamiento del Congreso como institución democrática.
Con estas nuevas normativas, el Congreso de los Diputados busca equilibrar el acceso del público a la institución con la necesidad de mantener un entorno seguro y respetuoso, garantizando así la dignidad de la Cámara y su patrimonio histórico.