El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha reafirmado su compromiso con la OTAN durante una reciente cumbre de líderes europeos, a pesar de las críticas por no aumentar el gasto en defensa hasta el 5% del PIB. En una rueda de prensa celebrada en Bruselas, tras la reunión del Consejo Europeo, Sánchez expresó su descontento ante las insinuaciones de que su postura podría debilitar el compromiso de España con la alianza transatlántica. Aseguró que su enfoque no es un «seguidismo ciego» como el que, según él, proponen otros líderes políticos en España, refiriéndose específicamente al líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo.
Durante su intervención, Sánchez destacó que, a pesar de su decisión de mantener el gasto en defensa en un 2,1% del PIB, España seguirá siendo un actor clave en la seguridad y defensa europea. «Ser europeísta y atlantista no implica seguir ciegamente lo que otros proponen», afirmó, enfatizando que su responsabilidad es defender los intereses generales de los españoles. En este sentido, el presidente subrayó que su gobierno ha logrado un equilibrio entre las capacidades acordadas con la OTAN y la garantía de un estado de bienestar fuerte en España.
### Medidas concretas contra Israel
En el marco de la cumbre, Sánchez también abordó la situación en Oriente Medio, haciendo hincapié en la necesidad de adoptar medidas concretas para presionar a Israel. El mandatario español solicitó la suspensión del acuerdo entre la Unión Europea e Israel debido a las violaciones de derechos humanos por parte del gobierno de Benjamin Netanyahu. Esta postura se basa en un reciente informe del representante especial de derechos humanos de la UE, que señala que Israel estaría incumpliendo sus obligaciones en este ámbito.
«No podemos quedarnos pasivos ante la situación actual», afirmó Sánchez, quien instó a los líderes europeos a actuar en consecuencia. En este sentido, se acordó que en el próximo consejo de ministros de Asuntos Exteriores, que se celebrará en julio, se discutirán medidas concretas para abordar la crisis en Gaza y Cisjordania. El presidente español enfatizó que la UE tiene «palancas de presión» para instar al gobierno israelí a cesar las hostilidades y trabajar hacia una solución de dos estados.
Sánchez también se refirió a las amenazas arancelarias planteadas por el presidente estadounidense, Donald Trump, quien ha criticado a España por su postura en la OTAN. El presidente español aclaró que la política comercial está en manos de Bruselas y que todos los países, no solo España, han enfrentado tarifas y aranceles. A pesar de las tensiones, Sánchez se mostró optimista sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo comercial beneficioso tanto para Estados Unidos como para Europa.
### La defensa de los intereses españoles
En su discurso, Sánchez reiteró que su deber como presidente es defender los intereses de los españoles. «Para eso me pagan», dijo, subrayando que su enfoque en la defensa y la seguridad no debe comprometer el bienestar de la población. Aseguró que el gasto en defensa se basa en cálculos técnicos realizados por las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Defensa, y no en decisiones arbitrarias.
El presidente también destacó la importancia de mantener una posición constructiva en las organizaciones multilaterales, buscando siempre el equilibrio entre las obligaciones internacionales y las necesidades internas del país. «Hemos logrado un acuerdo muy positivo que salvaguarda la unidad de la OTAN y garantiza un estado de bienestar fuerte», afirmó.
En resumen, la reciente cumbre europea ha sido un escenario clave para que Pedro Sánchez reafirme su compromiso con la OTAN y su postura crítica hacia las acciones de Israel en Oriente Medio. A medida que se acercan las discusiones sobre medidas concretas en julio, la comunidad internacional estará atenta a cómo se desarrollan estos temas y qué implicaciones tendrán para la política exterior de España y su papel en la UE.