La reciente reforma de la Ley de Asociaciones en España, impulsada por el PSOE, busca establecer un marco legal que permita la disolución de entidades que promuevan la apología del franquismo. Este proyecto de ley se presentará en el Pleno del Congreso, donde requerirá una mayoría absoluta para su aprobación, lo que implica que el gobierno deberá contar con el apoyo de sus aliados políticos.
La propuesta se enmarca dentro de la Ley de Memoria Democrática, que fue aprobada en octubre de 2022, y que ya contemplaba la necesidad de modificar la legislación sobre asociaciones. La reforma tiene como objetivo principal evitar que organizaciones como la Fundación Francisco Franco puedan operar bajo la protección de la ley, especialmente si intentan transformarse en asociaciones para eludir su disolución.
Uno de los puntos clave de esta reforma es la inclusión de una disposición adicional que establece como causa de disolución la realización de actividades que constituyan apología del franquismo. Esto incluye el ensalzamiento del golpe de Estado de 1936 y de la dictadura que le siguió, así como cualquier actividad que menosprecie o humille a las víctimas de estos eventos. La norma también contempla la incitación al odio o la violencia contra estas víctimas como un motivo válido para la disolución.
La reforma no solo se limita a las asociaciones, sino que también se ha introducido una nueva vía para la disolución a través de la acción penal. Esto significa que el Ministerio Fiscal podrá actuar en casos donde se detecten delitos relacionados con derechos fundamentales, especialmente en situaciones de incitación al odio o a la violencia. Esta medida busca fortalecer la protección de la memoria democrática y de las víctimas del franquismo, permitiendo que entidades y personas jurídicas que defiendan estos valores puedan tener un papel activo en la defensa de la ley.
El proceso legislativo ha sido respaldado por varios partidos, incluyendo a Sumar, ERC, Junts, PNV y Bildu, mientras que el PP y UPN se han abstenido y Vox ha votado en contra. La aprobación de esta reforma es vista como un paso importante en la lucha contra la impunidad de las organizaciones que glorifican el franquismo y en la promoción de una memoria histórica más justa y equitativa.
La ley también establece que la disolución de las asociaciones se llevará a cabo mediante resolución judicial, lo que garantiza un proceso legal adecuado y transparente. Esto es fundamental para asegurar que las decisiones se tomen de manera justa y que se respeten los derechos de todas las partes involucradas.
El contexto actual en España, marcado por un creciente interés en la memoria histórica y la justicia social, hace que esta reforma sea especialmente relevante. La sociedad española ha estado demandando un reconocimiento y una reparación por los crímenes del pasado, y esta legislación podría ser un paso significativo hacia la reconciliación y la sanación.
A medida que la reforma avanza en el proceso legislativo, se espera que genere un amplio debate en la sociedad sobre la memoria histórica, la justicia y el papel del franquismo en la historia reciente de España. La atención se centrará en cómo se implementará esta ley y qué impacto tendrá en las organizaciones que operan en el país.
En resumen, la reforma de la Ley de Asociaciones representa un esfuerzo por parte del gobierno español para abordar el legado del franquismo y garantizar que las organizaciones que promueven su ideología no tengan cabida en la sociedad actual. La aprobación de esta ley podría marcar un hito en la lucha por la memoria democrática y la justicia en España.